Naturaleza urbana en sociedad

“Stakeholders”, Jardineros y Arbolistas, profesionales de calle

Recientemente me crucé con un jardinero; se encontraba de ruta de parques y me acerqué a saludarle. Yo venía de un encuentro en el que había sido invitada para hablar de la Infraestructura Verde en las ciudades y de cómo posibilitarla para conseguir mejores ciudades. Hoy os hablo de ellos, profesionales clave en el éxito del proyecto del Verde Público ante el nuevo cambio de paradigma.

En el propio encuentro, en el turno de debate, uno de los asistentes habló de los jardineros de calle, de su fatiga por recibir la queja o la reclamación de esto o lo otro por parte del vecino, por tratarse del referente que acomete los trabajos y está presente en el lugar.

Curiosamente el jardinero, un rato después me apuntó en la misma dirección, acerca de la fatiga que les producen estas demandas continuas. En la ciudad donde resido, los contratos tienen implantado un sistema de certificación variable para abonar ciertos trabajos de jardinería y los tiempos de explicaciones no se consideraron en su momento como trabajo efectivo. En la búsqueda de la rentabilidad y la eficiencia en ocasiones olvidamos que cada vez más, el ciudadano se siente partícipe del verde y se dirige, en primera instancia al jardinero de proximidad.

En los mismos términos, sucede con los trabajadores del árbol, los profesionales que acometen podas siguiendo prescripciones técnicas de los técnicos que dirigen los trabajos. En demasiadas ocasiones, los criterios de intervención marcados discrepan del parecer del ciudadano y se les increpa y descalifica. Trabajar de este modo agota, y de igual modo que con el jardinero de calle, una parte del colectivo así me lo traslada, mucho más allá de la ciudad en la que resido, tónica generalizada en muchas de nuestras ciudades.

Los que leéis este blog con asiduidad quizás recordéis un post que publiqué hace tiempo, y rescato para hoy en relación al desgaste de trabajar en la calle en lo público, especialmente en aquellos parques vandalizados en los que tu trabajo se limita a repetir reparaciones que cuestan más que tu sueldo.

Ahora que trabajo como consultora, el contraste surge por comparación en torno a los jardineros de hoteles, en general disfrutan de un trabajo que se respeta y no se ve interferido, y no son cuestionados a diario. Surge entre ellos eso sí, la sensación de ser invisibles, como el resto de personal de mantenimiento.

Por un lado está creciendo la conciencia social de que la presencia de verde de calidad en nuestro entorno de proximidad ejerce un efecto positivo en la salud de los que habitamos las ciudades; recientemente un estudio de impacto en salud liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado por Fundación ”la Caixa”, ha concluido que implementar ejes verdes a lo largo de toda la ciudad de Barcelona reportaría una “reducción considerable” en los problemas de salud mental que soporta la población adulta y en los costes directos e indirectos asociados a los mismos.

Curioso paradigma, el cuidado del verde urbano nos beneficia como grupo, pero agota al que lo trabaja. Hoy la reflexión va encaminada a cuidar al profesional de calle, debemos darles herramientas, formación, escucharles y hacerles partícipes del cambio de paradigma. Recientemente varios colegas han publicado en relación a este eslabón de la cadena con acierto, y comparto hoy con vosotros.

 

Luis Alberto Diaz-Galiano.- Jardinero.

Josep M Mompín Valeri.- Los actores olvidados del nuevo modelo de Jardines.- Mophin’s jardins- Visitando Jardines

 

 

Inma Gascón

Ingeniero Agrónomo

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