Naturaleza urbana en sociedad

Ahora que sé que Darwin viene a la ciudad

El trabajo de gestión de un servicio vivo como el de Parques y Jardines en la Ciudad tiene su complejidad. Con frecuencia tendemos a gestionar de forma interdepartamental, como cajas estancas sin apenas conexiones. Del mismo modo, si bien no todos, tendemos a prestar atención a lo que entendemos que el verde necesita, obviando el resto de vida que discurre en nuestros espacios y nuestra ciudad. Hoy en día esta tendencia está cambiando, y aprovechando el título del libro que os presento, os invito a reflexionar sobre ello. Darwin viene a la ciudad, de Menno Schilthuizen, te va a sorprender.

Encontré este título, junto a los de Santiago Beruete, publicados también por Turner, en mi querida librería Babel, fue una invitación a su lectura. Nadie me había hablado de él, ni conocía a su autor. Menno, nos habla de la diversidad de los ecosistemas urbanos como no he visto hacerlo a nadie. Es ameno, y accesible y tiene esa capacidad que solo he visto en unos pocos científicos de traducir temas complejos, y hacérnoslos comprensibles a los que nunca cursaremos un doctorado, pero nos gusta tomar nuestras decisiones apoyándonos en la evidencia científica. 

Os hablaba en la cabecera de la importancia de trabajar en la administración en áreas transversales interconectadas que funcionen como tales, no renuncio a ello a pesar de que los golpes de realidad en ocasiones evidencian lo contrario; como parte fundamental de este concepto está mi perseverancia a vincular nuestra Naturaleza Urbana y hacerlo en sociedad, leiv motiv del Blog. ¿Os habéis parado a contemplar con detalle el icono del blog, que creó en esta idea Juanjo Ramos?

Ceñir el Servicio de Parques y Jardines, solo a su título lo encaja, lo estanca, lo encajona. De nada sirve que tomemos las decisiones conforme al verde, si no estamos abiertos a un diálogo social en torno a este. Leer, compartir, mirar, escuchar, estar receptivos a lo que la sociedad demanda y ser valientes, incorporando actuaciones contrarias a lo convencional (si estas se precisan), resulta hoy más que nunca imprescindible. El libro habla de acciones acometidas a título individual o por  grupos o colectivos de interés que se agrupan en torno a una idea (Plataforma, Colectivo o Asociación, etc.,), pero también de los científicos, que estudian y profundizan sobre la naturaleza urbana y los espacios de transición, y de los gestores. Pero no todo parte del egocentrismo de nuestra especie. 

La clave del libro es la capacidad de ofrecernos desgranado qué está pasando en la transformación de los ecosistemas urbanos, porqué sucede, y hacia donde vamos. Apela a la participación de una sociedad activa, que lee y entiende, y con responsabilidad aporta participación desinteresada en estudios de campos urbanos, que permiten llegar a conclusiones.

Conscientes de que la tendencia a vivir en las ciudades no es un fenómeno retornable a corto plazo, necesitamos adaptar las ciudades, conociendo el funcionamiento de los ecositemas; las deciciones de los gestores pueden alterarlos, debemos  favorecer mejoras, es una responsabilidad a autoimponernos. Para ello necesitaremos una sociedad responsable, abierta a escuchar, no populista, y que políticos y medios de comunicación nos acompañen y ayuden a completar este proceso. Solos fracasaremos. 

Mennon, después de todo un recorrido ameno ejemplificando porqués, acaba postulando en su último capítulo titulado como el libro, sus Directrices improvisadas para la Construcción Urbana, teniendo en cuenta a Darwin: cuatro normas para la planificación ecológica urbana integrada en la evolución natural. Son Valientes y sujetas a debate, me atrevo a citarlas, sin hacer de spoiler, con la voluntad de que os sumerjáis en su lectura, toda una joya, y reflexionéis sobre ello, conocido todo el expositivo del libro.

Norma número 1.- Que las plantas crezcan solas.

Norma número 2.- No tienen porqué ser especies nativas.

Norma número 3.- Parches urbanos primigenios

Norma número 4.- Espléndido aislamiento.

Como el programa del pasado Domingo de El Bosque Habitado de mi admirada Maria José Parejo, bajo el lema #CiudadAgropolitanaRadio3, Jaime Izquierdo nos exponía ideas relacionadas a las interesadas por Menno. Trabajar desde diferentes frentes en la consecución de un mismo objetivo, nuevos modelos para nuevos tiempos, que nos quede el haberlo intentado.

Ojála surjan más publicaciones de la misma naturaleza, deberían ser lectura obligada de gestores, comunicadores, políticos y vecinos con voluntad de aportar. Pero especialmente importante el papel de los que gestionamos, porque tenemos la obligación de estar abiertos a cambios para transformar nuestras ciudades, esperamos, a mejor. ¿Te imaginas?

Inma Gascón

Ingeniero Agrónomo

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